12.9.08

Untitled

La lucha por la supervivencia del amor humano es la misma que la supervivencia por tu propia vida. No eres quien eres y lloras a escondidas sufriendo problemas que no deberías saber. A veces en esta lucha debemos ser fuertes y mantenernos firmes; si hay que odiar se odia, si hay que morir se muere, pero si hay que matar...se mata. En lo bizarro de la mente, en el lugar más recóndito de sitios perdidos, sin que nadie te mire: grita y llora de dolor hasta que te lo quites de encima. Quítate ese sufrimiento inventado coronado como cúspide de tu negatividad. Siéntete amada por unos pocos pero no por el principal y olvida a quien no existe y solo habla palabras de convicción. Correría hasta morir, moriría de verte así, como imagino en mis pesadillas.