30.5.08

Amar


Y cuando me enfado mucho... corren ríos de cólera y rabia. Ríos de mi sufrimiento, ríos de mi sangre. Cuando me enfado mucho, recuerdo todo el daño que me diste, todo el que me hizo ser fuerte como persona que soy. ¡Daño! sabes que corres peligro, sabes que te haces indefenso y yo inmune. No conoces la situación aunque la hayas vivido en infiernos aislados y poderosos. Olvidos no perdones es lo que debo. Quiero que pienses, que retornes, que vuelvas a poner tus ojos en blanco y pensar en lo último que pensarás. Te asustaré y te mentiré, todo por tal de quererte más la próxima vez.

29.5.08

Simple

Lo ves complicado. Ves tu vida como una maraña de conocimientos que se enredan, de ilusiones que se truncan en un segundo, de unas fuerzas débiles que te obligan a aminorar tu marcha. Sabes que detrás de un descubrimiento hay miles por estudiar e infinidad que lo promueve. Hay demasiado en el Universo, tanto que no me da tiempo en mi vida de descubrirlo. No puedo saberlo todo, pero al menos las cosas importantes debería cumplirse. Los sueños dependen de la fantasía que haya detrás de ellos y de la recreación de los momentos vividos que te encuentras dentro de ellos. Deslía las cosas, palia los enredos.

8.5.08

Ambos

Guardas tu rencor. No recriminas el dolor que te sucedí. Sonríes cuando deseas matarme por dentro. No olvidas pero perdonas. Me miras amable pero en el momento en el que más deseas apartar tu vista de mí, es cuando no puedes. Escuchas, bebes, cuentas... Tus dedos vuelven a estar sonrojados, tus recuerdos apagados, tus pensamientos: al lado. Bebes, miras, deseas, pero sabes que el recuerdo vive en el aire rojo que te fascina. Hay cosas que quieres decir, pero tu dignidad las calla. Tu cama no me recuerda ese poco tiempo de persianas rotas, de maletas en el suelo y de cartas rosas. Ahora es más grande, más caliente, más distinto, más con otra.